En algún lugar leí que las personas debemos pensar en gran escala. Que el mundo tiene graves problemas que resolver.Las personas que apuestan a ver las cosas en escala mundial, a futuro vivirán mejor.
Que el pensamiento en pequeña escala, "en chiquito" es de cobardes. Perjudica nuestra autoestima y nos hace mediocres a los ojos de los demás.
Esta frase, expresada como una dicotomía (grande/pequeño, exitosos/mediocres, mejores/peores),quedó dando vueltas en algún rincón de mi mente.
Hasta que sucedieron varias cosas:
1- Esta foto "me encontró" mientras buscaba otra.
Mis pensamientos fueron chiquitos:
"¿lo esquivo? ¿camino como si no existiera? ¿si le fotografío sin trípode y con este viento...?"
2 - Me han dicho que la guarde. Que conserve ésta y otras más para el día que me presente a tomar un curso de fotografía y me pidan trabajos originales.
El consejo me pareció correcto y, junto con unas pocas más, las mezquinaba queriendo "pensar en grande".
3 - Alguien del otro lado del charco pensó en mí y actuó.
Aunque en el mundo hay gravísimos problemas que resolver, he elegido lo pequeño, lo que puedo hacer: dar lo que tengo, y que en otra circunstancia me hubiera costado dar.
Quizá sea lo mejor: empezar por lo pequeño, lo mínimo, lo cercano.
Lo más difícil. Un gesto, una palabra, un llamado, una caricia, un silencio.
La vida es ahora un poquito mejor, aunque el mundo no lo note.
Quizá.
De: Assarhaddón mira la luna reflejada en la charca.
Fecha: 2009-02-24 17:53
Y qué podría añadir yo, para el cual uno de los momento cumbre del arte y del buen gusto... en fin. Podría aprovechar para hablar de lo ilusorio e insustancial de esta realidad, como la luna que se refleja en un charco (rollo budista), así que todo problema grande o pequeño es eso... ilusión carente de verdadera realidad, hala problema resuelto.
Aunque lo de poder sacarla así de repente del baúl es una sorpresa que merece la pena. Yo, en tanto que blog, agradezco el detalle de hacerla pública aquí. Me hace mucha ilusión esto de las primeras ediciones y aquí me tratáis muy bien (todavía recuerdo la poesía de Senior citizen) :-)
Con todos mis respetos, señor Rodríguez, llamarle chula a esta foto no me parece propio de un señor formal y serio procedente de brumosas islas, sino más bien de una jovencita aun no experta en los caminos de la vida que Vd. y yo transitamos.
Sin embargo, dejémoslo pasar, disculpando la juventud y la inexperiencia, y añadiendo a chula otro adjetivo: poética.
Uups...¡qué bueno!
¡La parroquia está trastocada, a Assar se le olvida el lanzallamas,(gracias por hacerlo notar, Anónima )!
Y no es sólo eso, Rodriguez adopta un lenguaje adolescente, mientras Senior citizen recuerda, con gran conocimiento del "argentino" que "bonito" es un adjetivo que usamos muy poco (pero lo estamos incorporando).
Como si fuera poco,Sofocador ¡me ha revelado el misterio del Haiku!
Revelado...verbo que gustaba usar Borges.
Que me viene bien tener aquí sus obras, de las cuales rescato
"...todo regalo verdadero es recíproco. El que da no se priva de lo que da. Dar y recibir son lo mismo."
Es parte de la dedicatoria que él mismo escribió a su libro
`La Cifra´. Editorial Emece, Buenos Aires, 1981.
Senior citizen: Si, perfectamente pero se acercan demasiado a metáforas, en Remansos, Lorca hace uso de la metonimia. Su poesía es notable por el uso de Tropos de este tipo.
La canción tonta es un haiku notable.
Borges estudió y utilizó la metáfora que tiene origen en los idiomas germánicos donde fue muy utilizada y donde muchas palabras son pequeñas metáforas en sí mismas. Lo de su interés por los haikus quizá lo descubrió por María Kodama y luego de explorarlo lo incluyó en sus escritos.
El haiku no es una metáfora, es una sentencia o historia muy breve con significado propio que induce a pensar.
Tengamos en cuenta que "escritos" en los idiomas originales son dibujos, logos, o sea ideas visuales, no sonidos con significado como tenemos aceptado nosotros en nuestra forma de leer.
Los haikus han sido siempre una incógnita para mí, algo muy ajeno, muy apartado de mi sensibilidad y mis parámetros mentales. En cambio, el lenguaje de mi paisano me resulta claro, transparente, aun en los libros que se consideran más "oscuros" y que se han venido a llamar surrealistas.
Contaba Carlos Cano que en un concierto en un pueblo, en el que interpretó las canciones del disco El diván del Tamarit, se le acercó una señora mayor y le dijo: No he entendido nada, niño, pero ¡que bonito!
Holitassssssss a todosssss
maravillosa dispersion!!! recuerdo haber leido alguna vez Haikus!! si, me encantaban las paradojas que se econdian en ellos!!! que bueno volver a recordarlos...
aguante la dispersion!!!
besitos mil
Chivi
¡Y qué bueno que te gusten los Haikus, que para mí son un secreto impenetrable!
Sofocador, por ejemplo, suele hablarnos de ellos, ahí tienes un referente válido...muchos queremos entender de qué van.